Desde pequeña, el mes de septiembre era mi mes favorito: nuevo curso, nuevos compañeros, nuevos retos…
Era un volver a empezar lleno de posibilidades… y reconozco que, a fecha de hoy, aún lo siento así.
Este verano, entre otras cosas que os iré contando en otras entradas, he puesto a prueba mi nueva cámara… la esperada Z6 de Nikon.
Con esta joya, los chicos de Nikon se ha apuntado al caballo de las mirorless, y yo, nikonista hasta la médula, me picaba muchísimo la curiosidad de esta interesante opción. Estuve probando una y, tengo que reconocerlo, me enamoró.
Así que realicé un par de sesiones con ella, aunque utilizando mi 750 de apoyo, y ya este verano me volqué con ella estrujando al máximo sus posibilidades.
TAMAÑO, TOTALMENTE SILENCIOSA Y DETALLES DE LUJO
Pequeña, manejable, discreta y con un detalle a remarcar: el modo silencio. Se acabó el click tan molesto en algunas ocasiones. Cuantas veces he “pillado” a un peque en su mundo sabiendo que sólo tengo un disparo, ya que con el click se girará y se desvanecerá ese momento único e irrepetible.
Con esta silenciosa opción mi margen de maniobra es mayor ya que paso más desapercibida :D. (¡aunque al final siempre me pillan!)
Otro detalle es el visor real que incorpora. Como siempre trabajo en manual y mido la luz en puntual, el poder ver cómo va quedar mi foto final en todo momento es un lujo, sobre todo cuando cambias de forma rápida de situación lumínica, por ejemplo de un interior a un exterior.
También destacaría el rango dinámico, especialmente cuando se disparan contraluces en interior. Tener margen para levantar las sombras y seguir teniendo una imagen de la calidad, es fantástico.
Estas son tan solo algunas de las virtudes más destacables de la nueva y novedosa Z6. Y lo confieso.. me tiene enamorada :D.
Antes del verano Nikon me preguntó por mis impresiones, que junto con las opiniones de otros compañeros de otras disciplinas, sirvieron parar realizar la siguiente entrada en NIKONISTAS.
Si tenéis alguna duda o consulta no dudéis en preguntar, os contestaré encantada.
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